“al principio, yo los leía para no dormirme;
después los leí con más atención, y luego con avidez. Ante mí se abrió de
pronto un mundo nuevo, totalmente ignoto y desconocido. Nuevos pensamientos y
nuevas impresiones se precipitaban, formando un caudaloso torrente, sobre mi
corazón. Y cuanta más emoción, más turbación, más esfuerzo me costaba asimilar
aquellas nuevas sensaciones, más dulce era la sacudida que me producían. Se
agolpaban en mi alma, sin dejarme siquiera respirar. Un caos indefinible
empezaba a trastornar todo mi ser”
Pobre gente - Fiódor M. Dostoievski
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada